Hagamos crítica social… “mi primera casa” o “la casa nueva”

El otro día visite a un amigo arquitecto, el en este momento con su empresa ya instaurada me cuenta que trabaja como empresa prestadora de servicios del gobierno, el asunto que el trata es sobre el mejoramiento de la vivienda, una buena oportunidad para las familias que lo dejan o postergan arreglos en la casa por simplemente sobrellevar la familia.

Como todos sabemos muchos de los gobiernos que hay ofrecen dinero (llamado acá comúnmente subsidios) de este dinero se pueden dar dos casos, primero que puede ayudar a la obtención de una casa completamente propia y con terreno para pueda edificar ampliaciones si puede hacerlas, por otro lado hay otro subsidio que puede ser destinado para cualquier cosa que se les ocurra hacer pero en la casa, ya sea ampliaciones o arreglos generales (baño, cocina, piezas o techo), todos estos a través de concursos donde todos los dueños de casas del gobierno participan.

Partamos por la casa, la mayoría de las edificaciones están hechas de forma pareada (quiere decir que al menos una de las paredes toca a las casa de al lado) que pasa con esto, como son casas hechas de ladrillos que comparten una pared en común como ya lo he dicho, esa pared tiene el grosor de solo los ladrillos y la transmisión de sonido es bastante buena, a tal punto que puedo escuchar cuando bajan o suben su escalera, conversan o otras cosas que no mencionare, pero se escuchan. Por otra parte como se planifica en el tema de optimización del espacio la parte construida no sobrepasa el tamaño de tres piezas, donde además hay que meter todo apretado, casi el sillón bajo la mesa de centro y el televisor del living sobre la mesa del comedor. A pesar de que tiene metros para construir, gracias a nuestras leyes que son muy “inteligentes” (por no decir un chilenismo que se me viene a la cabeza), el dueño no puede aprovecharlos todos debido a que no puede construir hacia delante, es decir el frontis de la casa y la infraestructura de esta, o mejor dicho donde hay mas espacio para edificar, es adelante. Por otra parte como lo dije antes la privacidad se va literalmente a la “punta del cerro”, por que, como lo dije se escucha todo donde el ladrillo no es demasiado grueso y además de que no cumplen con la reglamentación. A las finales como siempre en este país las cosas hechas a medias.

Si uno se pone a buscar culpables la verdad es, que en cierta forma va desde el que diseño la casa hasta el que puso uno de los ladrillos, por que no puede ser que si buscas en Internet la vivienda social peruana sale algo mucho mas grande, y eso que siempre nos estamos burlando por que acá en chile viven hacinados. Quien sabe que carazos tenia e la cabeza el tipo que las diseña, creerá en el minimalismo o algo así, a quien se le ocurre que uno es capas de meter un living, el comedor y además la tele familiar (que para que estamos con cosas todos la tienen) en un sector que no mide mas de 3 metros cuadrados, además de que las piezas tiene la misma falla que las paredes colindantes, ni si quiera puedes tirarte un pedo sin que el otro lo escuche en la otra pieza, y para que decir del resto.

Ahora toquemos lo del otro subsidio y lo que se genera, imagínate que siempre estas corto de dinero, tienes una familia con dos hijos (que es el general que se da en la mayoría de las familias postulantes) y además de pagar todo lo que tienes que pagar siempre estas algo sobregirado con tu dinero. Si lo ves en ninguna parte se menciona la casa, ni ampliaciones ni mejoras, nada, hay que asumir que no hay dinero para esas cosas y si lo meditas un poco, llegar a un lugar que con el tiempo se vuelve lúgubre igual te estresa. El segundo subsidio del que les hablaba trata de esto más menos,  de que se recupere la casa y que se le agregue más valor (por ultimo que visualmente sea mas bella para que te de gusto llegar), pero el hombre es capaz incluso de ponerse trampas a si mismo si se lo propone. A que quiero llegar con esto, básicamente que siempre hay alguien disconforme con lo bueno.

 Felipe me contaba que ellos tratan con asambleas (que generalmente son juntas de vecinos) donde ellos los asesoran para sacarle el mejor provecho al dinero, en el sentido de materiales de buena calidad y a bajos precios, o el tipo de material que es mejor de acuerdo con lo que quieren hacer, dependiendo de la envergadura de cada proyecto es también la cantidad de dinero que entregan (o al menos así lo entendí yo), pero siempre con un tope.

Pasa que siempre cuando se le da beneficios a la gente, esta comienza a sentir envidia del otro por que se ve más bonito o le dieron más plata para el proyecto, que por que no me hicieron ese arreglo que a ella. A y se me olvidaba otro detalle, como van villas y cosas así, bodega no tienen, así que cuando deben guardar materiales (que se compran todos juntos por cierto) se deben guardar en una de las casas que es designada por sorteo o voluntario, es hay cuando los maestros donde entran y salen de esa casa, le hacen (con los materiales que sobran) una atención, lo cual pareciera ser peor para los demás vecinos que empiezan a despellejar al que le dieron el beneficio. Siempre me he preguntado por que tenemos el afán de meternos en las cosas de los demás, por que envidiar al otro por que hizo algo que a nosotros no se nos ocurrió, por que el celo, por que la envidia.

Me doy cuenta de que somos unos niños que queremos el juguete del otro, de que entre  mas edad tenemos mas tontos nos volvemos, es la verdad decepcionante, por que siempre pensar que el pasto del vecino es el más verde, que por que el o ella se caso con una persona mas bonita que yo, y así siempre. Por que no somos capaces de conformarnos con lo que la vida propia nos da. Si no se nos ocurrió algo… pero si se le ocurrió al otro, como dice un amigo –“paso la vieja hermano, si no se avispo es por algo”-, y claro uno cree que esto o aquello es mas importante que otras cosas, por esas actitudes es que somos un país a medias, por este tipo de estupideces, si te dan un beneficio aprovéchalo para ti, no para los demás, dejémonos de preocupar de lo que hace el de al lado (a menos de que hiciera un abuso o algo contra la ley), aprendamos a vivir bien con nosotros mismos.

La verdad también es un reflejo de nuestras carencias y necesidades que lamentablemente, como vivimos en un país donde no se piensa en el vivir de las personas, existen y se heredan de padres a hijos (además de la plata las deficiencias son heredables), se transmiten y la verdad como no podemos suplirlas todas siempre tratamos de desviarlas pensando en lo que tiene el otro, por que, si nosotros no lo tenemos no tendremos el mismo estatus, a las finales se queda en nada.

Me gustaría la verdad, ver un Chile más completo, no a medias, donde todos se ayudan y dan ideas, no cosas tan individualistas, también no tan pequeñas, pero también no tan materialista. Por que quizás nos expandiríamos mucho si agrandáramos todas las casas del gobierno, pero tendríamos gente feliz y cómoda, gente que no tendría la necesidad de sentirse tan bajo, o diferenciado por el como vive el de las condes, por nombrar algo, la verdad si entregáramos a la gente lo necesario no tendríamos que siempre estar exigiendo más de lo que siempre nos entregan. Debo decir que no desmerezco la vivienda social chilena, la verdad la instancia que se entrega es notable en el sentido que familias que siempre vivieron una vida llena de goteras, lamentaciones y quizás alguna que otra maldición contra el mundo. Es la verdad una buena instancia de superación, pero si me lo preguntan podría ser mejor.

Supongo que esta en nuestra cultura ser tan tontos…

-“las oportunidades solo ocurren una sola vez en la vida, si no la aprovechas es por que esa oportunidad no era para ti, o tu no estabas hecho para la oportunidad”-